Les Lleis i les seves ganes d'aplicar-les
Avui llegint un article d'un diari, un lector, anomenat "indomita terra", ha realitzat aquest escrit que he trobat molt bo.
Tracta sobre les lleis, la seva necessitat i la seva aplicació.
No l'havia escoltat mai. L'afegeixo tal com l'havia escrit ell/a...
********
En el primer día de clase, el profesor de “Introducción al Derecho” entró al aula y lo primero que hizo fue pedir el nombre de un estudiante que estaba sentado en la primera fila:
- ¿Cuál es su nombre?
- Mi nombre es Nelson, Señor.
- ¡Fuera de mi clase y no vuelva nunca más! – Gritó el maestro desagradable.
Nelson estaba desconcertado. Cuando volvió en sí, se levantó rápidamente recogió sus cosas y salió de la habitación.
Todo el mundo estaba asustado e indignado, pero nadie habló.
¡Muy bien! – Vamos a empezar, dijo el profesor.
- ¿Para qué sirven las leyes? preguntó el maestro – los estudiantes seguían asustados, pero poco a poco empezaron a responder a su pregunta:
- Para tener un orden en nuestra sociedad.
- ¡No! – Respondió el profesor.
- Para cumplirlas.
-¡No!
- Para que las personas equivocadas paguen por sus acciones.
- ¡No!
- ¿Alguien sabe la respuesta a esta pregunta!
- Para que se haga justicia – una muchacha habló con timidez.
- ¡Por fin! Es decir, por la justicia.
- Y ahora, ¿qué es la justicia?
Todos empezaron a molestarse por la actitud tan vil del profesor.
Sin embargo, continuaron respondiendo:
- A fin de salvaguardar los derechos humanos …
- Bien, ¿qué mas ? – preguntó el maestro.
- Para diferenciar el bien del mal, para recompensar a aquellos que hacen el bien …
- Ok, no está mal, pero respondan a esta pregunta:
-“¿Actué correctamente al expulsar a Nelson del aula?”
Todos estaban en silencio, nadie respondió.
- Quiero una respuesta por unanimidad!
- ¡No! – Todos contestaron con una sola voz.
- Se podría decir que he cometido una injusticia?
- ¡Sí!
- ¿Y por qué nadie hizo nada al respecto?
- Para que queremos leyes y reglas, si no tenemos la voluntad necesaria para practicarlas? Cada uno de ustedes tiene la obligación de hablar cuando es testigo de una injusticia. Todo . ¡No vuelvan a estar en silencio, nunca más! Vayan a buscar a Nelson – dijo.
- Después de todo, él es el maestro, yo soy un estudiante de otro período.
- Aprendan que cuando no defendemos nuestros derechos, se pierde la dignidad y la dignidad no puede ser negociada.
Tracta sobre les lleis, la seva necessitat i la seva aplicació.
No l'havia escoltat mai. L'afegeixo tal com l'havia escrit ell/a...
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En el primer día de clase, el profesor de “Introducción al Derecho” entró al aula y lo primero que hizo fue pedir el nombre de un estudiante que estaba sentado en la primera fila:
- ¿Cuál es su nombre?
- Mi nombre es Nelson, Señor.
- ¡Fuera de mi clase y no vuelva nunca más! – Gritó el maestro desagradable.
Nelson estaba desconcertado. Cuando volvió en sí, se levantó rápidamente recogió sus cosas y salió de la habitación.
Todo el mundo estaba asustado e indignado, pero nadie habló.
¡Muy bien! – Vamos a empezar, dijo el profesor.
- ¿Para qué sirven las leyes? preguntó el maestro – los estudiantes seguían asustados, pero poco a poco empezaron a responder a su pregunta:
- Para tener un orden en nuestra sociedad.
- ¡No! – Respondió el profesor.
- Para cumplirlas.
-¡No!
- Para que las personas equivocadas paguen por sus acciones.
- ¡No!
- ¿Alguien sabe la respuesta a esta pregunta!
- Para que se haga justicia – una muchacha habló con timidez.
- ¡Por fin! Es decir, por la justicia.
- Y ahora, ¿qué es la justicia?
Todos empezaron a molestarse por la actitud tan vil del profesor.
Sin embargo, continuaron respondiendo:
- A fin de salvaguardar los derechos humanos …
- Bien, ¿qué mas ? – preguntó el maestro.
- Para diferenciar el bien del mal, para recompensar a aquellos que hacen el bien …
- Ok, no está mal, pero respondan a esta pregunta:
-“¿Actué correctamente al expulsar a Nelson del aula?”
Todos estaban en silencio, nadie respondió.
- Quiero una respuesta por unanimidad!
- ¡No! – Todos contestaron con una sola voz.
- Se podría decir que he cometido una injusticia?
- ¡Sí!
- ¿Y por qué nadie hizo nada al respecto?
- Para que queremos leyes y reglas, si no tenemos la voluntad necesaria para practicarlas? Cada uno de ustedes tiene la obligación de hablar cuando es testigo de una injusticia. Todo . ¡No vuelvan a estar en silencio, nunca más! Vayan a buscar a Nelson – dijo.
- Después de todo, él es el maestro, yo soy un estudiante de otro período.
- Aprendan que cuando no defendemos nuestros derechos, se pierde la dignidad y la dignidad no puede ser negociada.
Una història interessant però sobretot pel final sembla una d'aquelles històries que abans s'enviaven per power point
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